Sportivo Bahiense se coronó campeón del torneo de Segunda División tras derrotar 68 a 64 a San Lorenzo del Sud en el quinto partido de la final.
El conjunto de calle Alvarado fue el dominador de la fase regular, quedándose con el primer puesto perdiendo tan solo un partido. Luego de pasar los cuartos de final y las semifinales sin problemas (ante El Nacional y Argentino), se encontró en la final ante un durísimo San Lorenzo, que terminó mostrando un papel más que dignó, y forzó hasta último momento al campeón de la categoría.
Sportivo vuelve al máximo esclaón del básquet local tras 35 años y luego de varias veces de estar a la puerta del ascenso.
SPORTIVO TRANSPIRÓ PARA SER CAMPEÓN
El quinto punto de la final no podía ser de otra forma. Sin diferencias abultadas en el marcador, cambiando continuamente el dominador del juego, y un cierre ajustado para darle mayor emoción al partido.
Los primeros diez minutos fueron para el local. A pesar de comenzar 0-6 abajo, una racha de la mano de Miguel y un triple de Sastre comenzó a darle aire para manejar los tantos del partido, cerrándolo 18 a 10 arriba.
Buscando evitar la remontada naranja, los dirigidos por Loffredo se apoyaron en sus jugadores de experiencia (Asnaghi, Tuero y Sastre) para mantener el doble dígito de diferencia en el marcador. Sanlo tuvo que ganarse los puntos en la línea ante la defensa aguerrida del rival, y seguir estando abajo (34-25) al cabo del primer tiempo.
La remontada visitante llegó transcurridos dos minutos del tercer periodo, con un Bendetti enorme (a pesar de su esguince de tobillo) y un Ferrari que siguió castigando yendo al aro. Un triple de Fortelli los puso en ventaja 39 a 38. Y tras cambiar varias veces en el marcador, el propio base naranja fue quien de vuelta desde la línea de tres le dio el 48 a 46 parcial a su equipo para encarar el último cuarto en ventaja.
Rápidamente respondió Sportivo. Miguel, Ayala y Montes anotaron de manera consecutiva para sacar cuatro de luz. Y con esa ventaja empezó a trabajar el local, dándole una pausa al juego y secando a su rival.
Miguel Garcia emergió con una bomba y un tiro de dos, Ayala se movió muy bien en la pintura y se ganó sus tantos, y la efectividad en la línea terminó siendo importante para sostener la ventaja.
Los dirigidos por Loffredo sacaban siete (63 a 56) con 4m16s por jugar. Una bandeja de Bendetti y otro triple de Fortelli acercaron a San Lorenzo que no se daba por vencido. Incluso tuvo la oportunidad de empatarlo con Agulló en la línea, aunque el ex Liniers malogró un libre, y a la siguiente ofensiva Ayala volvió a convertir en la zona pintada (65 a 62).
Y si bien el ex Napostá erró los dos libres que tuvo para sacar cinco, Agulló volvió a desaprovechar una bandeja cuando quedaban 54 segundos, y el propio Manuel fue quien anotó restando 29 segundos para poner 67 a 62 a su equipo.
Sanlo presionó con el juvenil Coria haciéndose fuerte en la pintura y poniendo a su equipo a tres (67 a 64). Tuero convirtió uno en la línea para establecer el 68 a 64 final, porque ya no quedaba tiempo para más. Solo para que Sportivo se desahogue y grite campeón.
COLO LOFFREDO: “HACE MUCHO ESPERÁBAMOS ESTE MOMENTO”
Miguel el “Colo” Loffredo logró un objetivo personal muy importante para el: obtener el ascenso con un club que lo recibió como su casa.
Desahogo y felicidad son las palabras que definen el momento del entrenador del campeón, que fue elegido para manejar un equipo visiblemente candidato desde el minuto cero.
“Hace mucho tiempo estábamos esperando este momento. Esto fue gracias a un trabajo de hace años. Hoy hay jugadores que no están, como Goeanaga, Seba Martínez, Tajan, Santarelli, que también son parte de esto. Y que los pudimos reemplazar con chicos como Ayala, Emanuel Miguel, Fausto De Paoli. Nos complementamos bien” reconoce el entrenador.
Sportivo nunca escapó a su responsabilidad de ir por el título. Ese fue siempre el final del camino trazado por un grupo de dirigentes, entrenadores y jugadores que entendieron cómo transitarlo.
“Desde el minuto uno se puso clara la regla: el objetivo es el ascenso. Y los objetivos se cumplen o no se cumplen. Yo le dije a los chicos que los sueños no vienen, hay que ir a buscarlos. Y por suerte entendieron el mensaje”.
No sin trabas en ese camino, como por ejemplo la pandemia:
“Nosotros en la pandemia trabajamos mucho por Zoom. A veces íbamos a correr por la ruta aunque no se podía, una vez nos agarró la policía. Nunca dejamos de trabajar para lograr esto”.
Otro escollo fue un rival durísimo en la final como San Lorenzo, que le ganó (2) más partidos que en toda la temporada (1).
“Lo de San Lorenzo es para felicitar. Lo que hizo en la serie fue monstruoso. Un equipo que fue de menor a mayor, llegó a la final en el mejor momento. Felicito a Claudio y a todo el equipo, y mandarle un saludo a Montanaro y Nahuel que lamentablemente se lesionaron y se perdieron esta final” reconoce Loffredo.
Sportivo se quedó justamente con el torneo de Segunda, logrando un eterno anhelo para convertirlo en realidad. Y con la frente en alto se fue San Lorenzo, que tendrá revancha a partir del próximo lunes ante Pacífico en la serie de Repechaje para volver a Primera.
