A lo largo de la última semana, Villa Mitre fue el organizador de la sede correspondiente a los Grupos C y D de la conferencia Sur de la Liga Argentina. El conjunto tricolor aprovechó la localía y se impuso en los cuatro partidos, mientras que Bahía Basket se fue 1-3 y no encuentra su juego.
VILLA MITRE SE HACE FUERTE EN LA LIGA ARGENTINA 21/22
Decir que Villa Mitre recuperó el juego de la Liga Argentina pasada, sería injusto con el rendimiento mostrado en esta seguidilla de cinco partidos, si contamos también la revancha contra Bahía Basket, el viernes previo al inicio de la sede en el José Martínez.
Los de Lisandro De Tomasi han dado un paso al frente en su juego: «el balance es altamente positivo, no solo por poder concretar resultados sino porque el equipo se va encontrando cada vez más sólido y compacto con el transcurso de la competencia», nos dice el entrenador tricolor.
«Éramos conscientes que teníamos que tener paciencia y trabajar duro para que la dinámica de juego que buscamos se vea plasmada en la cancha» y vaya que lo fue.
Desde el partido con Bahía Basket, al que derrotó de manera aplastante mostrando las diferencias de un equipo en construcción y búsqueda de identidad (como el de Cors) y otro que viene consolidado y cuyo objetivo pasa por ensamblar a los nuevos y buscar variantes a un juego que ya sale prácticamente de memoria.
«Los resultados nos permiten posicionarnos mejor en la tabla de posiciones, teniendo en cuenta que también pudimos quedarnos con la diferencia (pensando en el ordenamiento para la segunda fase) con los equipos que habíamos perdido, tal es el caso de Estudiantes (Olavarría), Bahía Basket y Gimnasia y Esgrima de La Plata», dice De Tomasi.
Villa Mitre se acomoda segundo en el Grupo C (20 pts) detrás de Deportivo Viedma (mejor récord de la Liga Argentina) y se empieza a posicionar bien para el arrastre de puntos de cara a la segunda fase.
A falta de dos partidos para el cierre (revancha ante Del Progreso y Deportivo Viedma (clasificado al Super 8) las perspectivas son más que positivas.
«Lo que más destaco es que pudimos defender nuestra casa de gran manera y que seguimos involucrando a las fichas menores dentro de nuestra rotación», esto ultimo que dice Lisandro De Tomasi, ha sido uno de los puntos más altos. Jano Martínez e Iván Gómez Lepez han demostrado que pueden cargar con la responsabilidad en el recambio y los jóvenes Santiago, Alem y Bussetti van sumando minutos aportando piernas frescas a los veteranos.
«Lo fundamental es que ellos (los jóvenes) saben que tienen que estar preparados porque las oportunidades las pueden tener en cualquier momento y tienen el respaldo y confianza de todos para poder concretarlo», dice el coach.
«Están haciendo un gran trabajo en el día a día, principalmente desde su compromiso, responsabilidad y sus ganas de querer ser parte y siempre querer más». Esas ganas se tradujeron en grandes actuaciones, sobre todo de Martínez y el puntaltense Gómez Lepez, que permitieron darle descanso a jugadores clave en la rotación tricolor y aportar en el juego con eficiencia y efectividad.
El campeón vigente de la zona Sur tuvo un paso arrollador sobre todo en el costado ofensivo, donde mostró una eficacia demoledora a caballo de un juego fluido con y sin pelota, lo que lo vuelve un equipo muy difícil de contrarrestar.
Javier Bollo dio un paso al frente en ofensiva durante esta sede, trabajando bien en la zona pintada y coordinándose de manera perfecta, con el siempre rendidor Ramiro Heinrich.
De la mano de la conducción de José Gutiérrez, Villa Mitre llevó el juego colectivo a su máxima expresión. El movimiento de pelota y jugadores fue altísimo sacando provecho de la amenaza latente de Harina en el perímetro y los aportes de Amigo.
A todo esto, hay que destacar que el tricolor ha sumado en esta Liga Argentina, la experiencia y versatilidad que da Jaamal Levy, a quien se ve cada vez más cómodo en el campo de juego aportando en ambos costados de la cancha.
«Tenemos variantes ofensivas en muchas manos y defensivamente somos un equipo que tiene claro conceptos, reglas y ajustes que nos permiten fortalecernos«, dice Lichi.
«El principal paso adelante que dimos en ésta sede fue mental, porque desde lo deportivo veníamos teniendo buenos pasajes, pero a veces no lo concretábamos en resultados».
La sede de Villa Mitre fue un verdadero éxito para el organizador, la dirigencia mostraba su alegría por poder traer al José Martínez estos 16 juegos y solo las inclemencias del tiempo, pusieron un lunar en una organización intachable.
«El trabajo de los dirigentes fue muy importante para que tengamos el estadio en las mejores condiciones y creo que salió todo muy bien».
«De esa manera, tuvimos la posibilidad de volver a jugar ante nuestra gente y que se pueda disfrutar del equipo.
Sentir el acompañamiento de los hinchas es muy lindo, porque contagian permanentemente», finalizó De Tomasi.
Un salto adelante en el juego y en la tabla de la Liga Argentina ha dado Villa Mitre y también un golpe sobre la mesa para demostrar que están para pelear bien arriba.
BAHÍA BASKET NO ENCUENTRA LA IDENTIDAD
Es muy difícil calificar el juego de Bahía Basket, sobre todo a lo hora de ponderar rendimientos en un equipo que no parece encontrar de donde agarrarse para hacerse fuerte.
Los dirigidos por Laura Cors son un conjunto plagado de talento, pero con jugadores que están terminando de formarse y definiendo su juego. El no contar en el plantel con veteranos que puedan marcar el camino está acentuando esos pasajes de irregularidad marcada por las distracciones y los errores no forzados.
Valentín Forestier es de los jugadores más regulares de Bahía, pero no parece tener el respaldo de la dinámica de juego de su equipo, que carga mucho en lo que puedan hacer Paz, Tolosa y Novaes.
Según responda este trío, parece determinar como le irá a Bahía Basket esta temporada de Liga Argentina, por lo menos hasta que desaten a Forestier y Azpilicueta.
El trabajo defensivo por momentos es aplicado y en determinados pasajes se vuelve anárquico e inexplicable, sobre todo a la hora de defender la transición o el eje de cancha.
Bahía Basket necesita cambiar muchos aspectos en la toma de responsabilidad ofensiva, implicar a más jugadores, sobre todo sus aleros y darle la confianza los secundarios para no cargar tanto con lo que puedan hacer el cordobés, el rosarino y el brasileño.
Estos dos partidos que quedan de la primera ronda son una prueba de fuego para determinar el futuro de Bahía en esta edición de la Liga Argentina. El talento está, pero el equipo de Cors y Ciro Bianchi necesita algo solvente de lo que agarrarse, algo que por ahora no ha encontrado.