En un Dow Center con buena convocatoria de público, Argentina se sobrepuso a un mal comienzo de partido, pero se quedó sin cierre para caer 67 a 63 ante Colombia.
Las imprecisiones de Argentina y el oportunismo de Colombia
Los primeros 20 minutos de juego estuvieron marcados por un conjunto visitante muy asertivo, que aprovechó cada una de las oportunidades que le facilitó su rival.
Las chicas de Leonardo Costa entraron con los típicos nervios del debut, a sabiendas también que era un partido cargado de presión, por lo sucedido en los Panamericanos y porque a priori era el juego que lo podía dejar bien parado de cara al domingo.
Con la conducción de Luciana De la Barba, Argentina intentó mover la pelota para atacar los espacios. El primer objetivo lo logró, pero no estuvo fino a la hora de llegar al gol, para colmo del otro lado las cafeteras parecían no fallar.
Mabel Martínez, de excelente primera mitad (17 pts), fue una verdadera pesadilla para las Gigantes que no supieron como pararla. Del otro lado, solo Agostina Burani parecía encontrar supremacía en la pintura y otorgarle la oportunidad de presionar tras anotación.
La estrategia por parte del cuerpo técnico nacional estaba clara, tratar de encontrar la anotación y presionar tras sumar, pero esto quedó trunco porque lo primero no ocurría y los errores en el traslado le dieron muchos puntos fáciles a Colombia que se empezó a despegar en el marcador.
La entrada de Florencia Chagas y Victoria Llorente revitalizaron la ofensiva por un momento, pero solo fue un espejismo.
Las 12 pérdidas, sumada a la sequía de larga distancia y la falta de complementos para anotar, posibilitaron un parcial de 11-0 en contra y ver como la desventaja se iba hasta los 18.
Otra vez, Burani como toda la noche saltó al rescate, aprovechando esta vez el pick and pop para castigar desde 6.75 metros y acercar a la selección a 10 de diferencia en el cierre de la primera mitad (28-38).
El esfuerzo de las Gigantes no fue suficiente
El tercer cuarto mostró lo mejor de Argentina en la noche. Se hizo fuerte en su campo, con una defensa escalonada sobre Mabel Martínez y aprovechó bien la contra.
Apareció Macarena Rosset para darle una segunda vía de gol a Argentina y Llorente le hizo la vida imposible a Martínez.
La entrada de Natacha Pérez le aportó mayor fortaleza y la presión empezó a dar dividendos a las de Costa, que se pusieron al frente al finalizar el cuarto por intermedio de Débora González.
Con la goleadora controlada por la defensa excepcional de Llorente fue Jennifer Muñoz y Manuela Ríos las que destrabaron el ataque cafetero. Además, el desgaste realizado por las Gigantes se empezó a dejar notar en un encuentro que se volvió cerrado y de ida y vuelta.
Ornella Santana dio la ventaja a la Argentina 61-60, pero dos errores consecutivos en la salida y en el traslado, pusieron a las visitantes una vez más al mando.
La clave estuvo en el cierre: las locales cometieron equivocaciones claves en el minuto final del partido (una falta evitable, que terminó en tres puntos) y una mala ejecución en ataque, para que Colombia liquidara el partido 67 a 63.
Argentina de esta manera complica sus posibilidades de clasificación y dependerá de un triunfo el domingo y la ayuda de resultados ajenos para alcanzar el objetivo.
El esfuerzo realizado en la segunda parte fue muy meritorio, pero no alcanzó para otorgarle una victoria que hubiese sido memorable por lo sucedido en la primera parte.
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