Continuamos en este segmento de carácter semanal que consta de un recorrido por los clubes afiliados a la ABB, en el que mostraremos el trabajo realizado en sus escuelas de Mini Básquet. Hoy el Club Atlético Barracas Central.
MINI BÁSQUET EN BARRACAS
En el medio de la ciudad, y rodeado de varios clubes, Barracas Central trabaja de manera sostenida de la mano de Darío Valentini en Mini Básquet, ayudado por Maxi Caneva y Franco Pino y en Escuelita, Catalina Arena e Iván Cataldo, todos y cada uno con el objetivo claro de fortalecer las bases de la institución con miras al futuro.
«Con respecto al año pasado, estamos sorprendidos de la cantidad de chicos que hemos incorporado. Sabíamos que se iban a sumar, porque estamos haciendo un trabajo de día a día muy bueno y viene dando resultados, pero no nos imaginábamos triplicar la cantidad que teníamos», dice Dario Valentini, encargado de Mini Básquet.
«Esto nos pone muy contentos y es un incentivo para seguir trabajando y poder lograr los objetivos que nos proponemos desde el Mini Básquet de Barracas».
«La gran respuesta que tuvimos nos incentiva a trabajar más y mejor. Estamos planificando varios viajes, algunos torneos en que vamos a participar y tenemos el respaldo de los dirigentes que entienden que el Mini Básquet es la columna vertebral de las formativas».
A la hora de hablar de cuales son los aspectos más importantes del básquet inicial, el entrenador dejó claro cuales son los puntos centrales y cómo los abordan desde la institución.
«Lo más importante para el Mini Básquet es el reclutamiento, tratar de captar la mayor cantidad de chicos/as y lograr el sentido de pertenencia con el club. Para eso, nuestro trabajo es intentar que se genere ese compromiso con la institución, que pasen el mayor tiempo que puedan acá y que se vinculen con las categorías mayores desde lo afectivo, para que se sostenga en el tiempo».
«Es clave trabajar a la par con los familiares, los dirigentes y el cuerpo técnico, para que las categorías iniciales el día de mañana nutran a las formativas y el plantel superior», comenta Darío.
El trabajo del profe o la profe de Mini Básquet es distinto al de los de categorías formativas, hay una tarea primordial de formación básica, sumada a otras cuestiones ajenas al deporte que tienen que considerarse a la hora de pararse frente a un grupo de niños/as.
«Es fundamental en la planificación del trabajo el realizarlo a largo plazo. Si el club te da la libertad de hacerlo podés pensar en ir desarrollando de a poco con los elementos, didáctica, práctica y demás», dice Valentini.
«Los dirigentes en la actualidad tienen que encargarse de muchas cosas y en este club se hacen las cosas a pulmón, por eso es importante que los familiares colaboren en las categorías iniciales con el entrenador, que oficia también de organizador en varios aspectos».
«El entrenador de Mini Básquet además de hacerse cargo de la formación tiene que dar un plus, organizar a los familiares, generar estímulos adicionales para que los chicos/as se enganchen y formen un ambiente lindo y de contención».
En cuanto al trabajo específico del deporte en el básquet inicial hay que contemplar muchas cosas, emparejar realidades, ocuparse de vincular la actividad con el entretenimiento y el captar la atención de niños y niñas que en la actualidad son propensos a la dispersión.
«Trato de trabajar la mitad del entrenamiento con un contenido lúdico y la otra mitad apuntada directamente a la parte más dura que pasa por los fundamentos. En lo lúdico, está incluido el aprendizaje de cuestiones básicas del deporte, para que sea más ameno para los chicos/as.», afirma el entrenador.
«El dribbling, pase, tiro, coordinación, flexibilidad y algunos detalles propios del básquet, como pasar y cortar, ocupar espacios y hacer la bandeja con ambas manos, serían el abc del Mini Básquet, todo esto sabiendo que no todos aprenden de la misma manera y por ello hay que tratar de generar actividades diferentes pensando en esa diversidad de aprendizaje».
«La enseñanza ha variado en los últimos años en Mini Básquet. Antes era todo más estructurado y apuntado a la parte dura de la técnica. En la actualidad el trabajo con pelota tiene mucho más peso, el dribble con balón, el dominio con ambas manos y el aprender a compartirla de la mejor manera. Intentar que los chicos/as identifiquen ventajas, que el pase sea tan fundamental como el llevar la pelota. Hay muy buenos ejercicios desde lo lúdico para que estas cuestiones sean aprendidas de la mejor manera».
El contexto actual ha cambiado las formas de vincularse con el deporte, la cantidad de tiempo que los niños/as pasan haciendo actividad física fuera del colegio y la reducción de los vínculos cara a cara, con mayor proliferación de elementos electrónicos. Esto impacta de manera directa con el básquet.
«La realidad de los chicos ahora ha cambiado mucho. Antes el contacto con el deporte o con las actividades deportivas era constante, tanto en la casa, el barrio o el colegio. Ahora esto no es así, se ha limitado el tiempo, por las muchas opciones tecnológicas y la falta de ejercicio físico».
«Muchas veces recibimos chicos/as con dificultad para realizar cosas elementales como el caminar, el correr. La motricidad y la coordinación es algo en lo que tenemos que trabajar el doble, de lo que lo hacíamos antes».
«Esta nueva realidad es un desafío para los profes de Mini Básquet, hay que redoblar el trabajo para compensar esa falta de acercamiento, no solo al básquet, si no al deporte en general. La mayoría de las veces llegan al club porque los familiares quieren que haga deporte porque está mucho tiempo con el celular o la computadora y ni si quiera sabe si le gusta el básquet. Por eso el trabajo del profe es doble, porque hay que enamorar al chico/a de la actividad y enseñarle a su vez la base física para que pueda practicarlo», afirma Valentini.
La falta de estímulos en los niños/as es una preocupación que exponen todos los entrenadores de categorías iniciales y que lleva a modificar muchas estructuras de enseñanza para tratar de cubrir dichas carencias.
«Los chicos antes venían al club con las capacidades motoras incorporadas o en proceso. Ahora tenemos que generarlas nosotros, lo que lleva a un trabajo doble. Una vez que logramos pulir la cuestión motriz, recién ahí podemos incorporar lo demás», dice Dario.
«Esta nueva realidad que vivimos incluso lleva a la modificación de los espacios dentro de los propios clubes. Hay que generar lugares adicionales para que los chicos tengan oportunidad de seguir vinculados a la institución y al deporte después del entrenamiento en si. Eso ayuda a pulir el trabajo, a estrechar los lazos con el club y a compensar esos tiempos recreativos que se tenían en el barrio».
No todas son malas noticias, tras la pandemia hay aspectos positivos que se van repitiendo en todos los clubes de la ciudad y que las instituciones tienen que tratar de aprovechar para consolidar su tareas social y deportiva.
«Desde el aspecto positivo, creo que la pandemia de COVID-19 ayudó a entender la importancia de la actividad física, por eso en la actualidad estamos con mayor cantidad de chicos en los clubes. Incluso nosotros que estamos rodeados de clubes a muy poca distancia tenemos una cantidad llamativa para lo que era tradicionalmente, esto hay que tratar de conservarlo, cuidarlo y reproducirlo en el tiempo».
«El 3×3 es algo muy positivo, está comprobado que esto genera más participación, que todos puedan tener la pelota más tiempo en las manos, tirar al aro y espacios reducidos para aprender a resolver y tomar decisiones».
«Creo que si algo hay que modificar es en las formas de jugar. Se tendría que unificar las formas para que no cambie de categoría a categoría, porque confunde, y no termina de consolidarse lo que se quiere lograr. Pre-Mini se juega de una manera, Mini Básquet de otra, U13 de otra y esto lleva a confusión y no consolidar resultados positivos evidentes, salvo en lo que marcaba del 3×3».
Barracas está consolidando su trabajo iniciado en 2020 y poco a poco este empieza a dar sus frutos. Ahora quiere seguir por esta línea de trabajo para sumar, en los años próximos, los elementos que lo lleven a dar el siguiente paso.