Continuamos en este segmento de carácter semanal que consta de un recorrido por los clubes afiliados a la ABB, en el que mostraremos el trabajo realizado en sus escuelas de Mini-Básquet. Hoy El Nacional.
MINI BÁSQUET EN EL NACIONAL
Se podría decir que El Nacional es uno de los clubes más particulares de la ABB: cuenta con su sede tradicional en calle Chiclana y su complejo deportivo en el Barrio Patagonia que cada día crece más. Esta situación lleva a que sea uno de los que más chicos y chicas reúne en el Mini Básquet.
«Este 2022 ha sido un año excepcional, que sigue a otro año excepcional por el tema de la pandemia de COVID-19. Tenemos 124 chicos/as en Escuelita, contando la del predio y la de la sede en Chiclana, ambas de carácter mixto», afirma Juan García, encargado del básquet celeste.
«Además, contamos con cinco equipos de Pre-Mini y con tres equipos de Mini Básquet de carácter mixto y uno de Femenino».
«El hecho de recuperar la actividad en Chiclana, sumado al crecimiento del barrio en el sector de la quinta nos llevó a estos números excepcionales. Hay que tener en cuenta que en la sede estamos rodeados en 13 cuadras de seis clubes y acá en la quinta somos el único club que brinda la actividad, por eso los números que estamos manejando en la actualidad».
Con Mauro Lacerenza como entrenador principal en la quinta, tanto en Pre Mini como en Mini Básquet, se suman al trabajo realizado en la sede de Chiclana donde se completan las cinco categorías de Pre Mini y de Mini. Además, cuentan con el adicional de trabajos físicos realizados por la profe Constanza Martínez.
En estos tiempos en que vamos saliendo de la Pandemia de COVID-19 , los clubes detectan algunas consecuencias negativas en los chicos y chicas producto del encierro y de la distancia social vivida en el 2020/21, por este motivo, en el Mini Básquet se trabaja de manera particular para ir mejorando estas deficiencias.
«Desde el año pasado, Juan García, me propuso hacer un trabajo especial con el Mini Básquet con dos bloques de coordinación. Estábamos detectando que algunos chicos tenían dificultades para correr, movilizarse hacia atrás, correr y picar, así que apuntamos a corregir estos defectos con trabajos específicos», dice Constanza Martínez, preparadora física del club.
«Está claro que la cuarentena, la situación de pandemia y el encierro han tenido resultados negativos en el desarrollo de habilidades que son claves para la actividad».
«Este tipo de cuestiones las veíamos en chicos y chicas que iniciaban de grande el deporte, pero ahora lo detectamos en la mayoría. Nos pasaba de ver que no coordinaban para hacer el doble paso, para picar y correr con el balón, cuando lo habían aprendido en Pre-Mini o Escuelita».
El trabajo en conjunto es clave en Mini Básquet, ya que es una edad en la que los chicos y chicas empiezan a desarrollar muchas habilidades que son claves para el deporte y para la vida, por esto, tanto en lo estrictamente físico, como en lo basquetbolístico, hay que aunar fuerzas para la mejora constante.
«Otra de las cuestiones que detectamos es que con la vuelta a la actividad los problemas coordinativos se acentuaron y no solo acá, lo hemos charlado con profes de otros clubes y es un problema generalizado. Por suerte, contamos con la profe que nos da una mano tremenda para poder mejorar en este apartado», dice Lacerenza.
«Hace 25 años que trabajo en Mini Básquet y las dificultades coordinativas y de motricidad fina vienen de varios años atrás. El hecho de que los chicos y chicas pasen más tiempo en sus casas, que la actividad física quede cada vez más restringida a momentos específicos en los colegios o en alguna actividad extra que realice el niño/a termina por potenciar estas dificultades».
«Tratamos de aumentar la cantidad de tiempo de básquet en conjunto con los trabajos de la profe para poder suplir estas faltas que vamos detectando. En total, estamos teniendo tres módulos de una hora y veinte minutos».
El Nacional tuvo que reestructurar los trabajos para dar respuesta a la gran cantidad de chicos y chicas que se acercaron para aprender básquet en las categorías iniciales, por lo tanto, dividió las categorías para darle un trabajo más pormenorizado a aquellos/as que se inician en la actividad.
«En Mini Básquet dividimos el grupo en dos, porque teníamos muchos chicos/as nuevos que había que trabajar de manera especial para incorporar más fundamento que lo que traían los que había hecho el proceso de Escuelita y Pre-Mini», comenta Lacerenza.
«La realidad es que los chicos/as tienen muchas ganas de aprender, nos muestran el entusiasmo en todos los entrenamientos y partidos. Esto es lo más importante en el Mini Básquet, porque además de aprender el deporte vienen a pasarla bien y divertirse».
«Trabajo con dos chicos del club en Pre-Mini y Mini Básquet que me ayudan en los entrenamientos teniendo en cuenta la cantidad de chicos/as con los que contamos. Es muy bueno que participen, porque se empiezan a formar en la actividad y colaboran conmigo en los entrenamientos así podemos estar atentos a las necesidades de los chicos/as».
Con la reparación de la cancha de Chiclana, donde también se realizan trabajos de Escuelita, Pre Mini y Mini Básquet, El Nacional suma infraestructura y cantidad de chicos y chicas que quieren practicar este deporte. Allí trabajan Juan Pablo Barutta y Martín Macaya, junto al profe Marcelo Ercoli, para formar las categorías iniciales que asisten a la sede histórica del club.
El Mini Básquet es la base de la que se nutren los clubes de la ciudad y El Nacional, puede mirar al futuro de la mejor manera con la tranquilidad de contar con una gran base humana con la que trabajar en pos de su crecimiento.